El Senasa llama a poner especial atención a la aparición de casos de peste porcina africana (PPA), peste porcina clásica (PPC) y síndrome respiratorio reproductivo porcino (PRRS) para que la Argentina continúe siendo libre de estas enfermedades virales que provocan graves consecuencias sanitarias y económicas.
En el marco de la campaña Avisá al Senasa sobre prevención y notificación de enfermedades de los animales, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) informa a veterinarios, productores y público general acerca de aquellas que involucran a los porcinos consideradas actualmente exóticas para nuestro país. En este sentido, existen tres enfermedades virales sobre las cuales hay que poner especial atención: peste porcina africana (PPA), peste porcina clásica (PPC) y síndrome respiratorio reproductivo porcino (PRRS).
El estatus sanitario de Argentina como país libre respecto a estas enfermedades brinda una condición favorable para la comercialización de porcinos y sus productos, con otros países. Es decir que su presencia no solo afectaría a la producción, sino que también podría traducirse en obstáculos o condicionamientos para el comercio internacional.
A fin de prevenir su introducción al país y mantener esta condición sanitaria, el Senasa lleva a cabo diversas actividades, como controles en las importaciones de reproductores y productos porcinos (posibles vehículos de estos virus), controles en las fronteras, y la permanente actualización de los requisitos de importación para cada país, acordes a su situación respecto a estas enfermedades. Asimismo, se realizan muestreos anuales a nivel nacional para monitorear el estado sanitario de las granjas y ratificar la condición de país libre.
Si bien el Senasa cumple un rol fundamental en la prevención del ingreso de estos virus al país, es también responsabilidad de productores, veterinarios acreditados y demás actores del sector productivo, aplicar medidas de bioseguridad, poder reconocer una enfermedad, y comprender que la notificación de sospechas permite la detección precoz y contención de un caso confirmado, lo que forma parte de la atención de emergencias para evitar la diseminación de enfermedades.
Con este objetivo, la principal indicación para viajeros consiste en no ingresar al país productos derivados de porcinos sin autorización del Senasa. Mientras que para veterinarios y productores, algunas de las principales medidas de prevención son:
- no alimentar a los cerdos con desechos de comidas de restaurantes, subproductos de carnicerías, mataderos, industrias cárnicas o lácteas u otros desechos de productos o subproductos alimenticios de origen animal, sin someterlos previamente a un proceso térmico que garantice su inocuidad;
- mantener limpios los corrales y sus alrededores;
- usar ropa exclusiva para la granja;
- restringir al máximo las visitas de personas ajenas y no ingresar animales sin los correspondientes controles, semen ni subproductos porcinos sin certificación sanitaria.
El Senasa resalta la importancia de la detección precoz de estas enfermedades, cuyo objetivo principal consiste en contener su propagación y disminuir el impacto directo sobre la producción y el comercio. Por este motivo, se actualizó el marco normativo para la notificación de enfermedades, mediante la Resolución 153/2021, la cual establece cuáles deben comunicarse ante el Senasa de manera obligatoria, así como los signos y síndromes que deben ser observados para considerar una sospecha.
Para notificar una mortandad o sospecha de una enfermedad detectada en porcinos domésticos o silvestres, se pueden utilizar los siguientes canales:
- En las oficinas del Senasa –comunicándose personalmente o por teléfono-.
- A través de la app “Notificaciones Senasa”, disponible para el sistema Android.
- Enviando un correo electrónico a notificaciones@senasa.gob.ar
La notificación de enfermedades porcinas resulta fundamental para robustecer la sensibilidad del sistema nacional de vigilancia y para que profesionales del Senasa puedan atender la emergencia, descartar o confirmar su presencia mediante pruebas de laboratorio, e implementar las medidas sanitarias de contención y erradicación, si correspondiera. Resulta necesario enfatizar que el proceso completo de atención oficial de una sospecha y resolución del caso, demora entre cinco y siete días. Cuidar el patrimonio sanitario porcino es cuidar el trabajo y la producción agropecuaria argentina.
Fuente: Senasa